El diseño lo vivimos todos.

Al involucrarnos con nuestra comunidad, creamos. Ahora, las interacciones virtuales han reemplazado en gran medida a las físicas.

Disruptive Labs

Uno de estos espacios donde todos pueden participar es el diseño: ¡todos somos diseñadores! Conforme las nuevas generaciones descubren lo que es quedarse en casa durante una contingencia, se recupera el valor por estar en lugares estimulantes, donde cada cosa tenga su lugar específico para generar armonía y tranquilidad.

Es cierto que en la pandemia coexisten diversas realidades. Los que hemos tenido la oportunidad de reflexionar y expresar nuestras inquietudes a través de nuestra creatividad, nos damos cuenta que, gracias al diseño, seguimos cuerdos. Potencializamos nuestra imaginación en todo momento: desde actos aparentemente sencillos como elegir nuestra vestimenta del día, hasta retos colosales, como idear la manera de mantener a nuestros hijos entretenidos y ocupados de manera positiva. A pesar de su tremenda hiperactividad.

El término “creativo” ha adquirido tantas connotaciones en la actualidad que se vuelve complicado de acotar. Sin embargo, las industrias creativas cuentan con un elemento distintivo en común: estimulan la innovación y contribuyen a la generación constante de ideas.

Aquellas empresas con cadenas de suministro vinculadas a las industrias creativas son más innovadoras que aquellas que no tienen ese vínculo. Diseño, posicionamiento de marca y publicidad son conceptos que volverán a tomar fuerza, pero ahora de manera digital. Por ejemplo, la convocatoria para un evento virtual ahora es lo que nutrirá el contenido del mismo. Entender qué inspira a los creativos para desarrollar ideas de valor cultural, se ha vuelto una prioridad en México y el mundo.

La integración digital y las redes sociales son dos conceptos que hoy en día debemos tener en cuenta porque quien no se atreva a involucrarse con ellos, está fuera del juego. Las redes sociales te abren un mundo porque tienes contacto con la gente, creas reacciones a tus trabajos o proyectos, conoces lo que comparten, día a día. Se suman comentarios. Estás formando comunidad sin tenerlo tan presente.

Si estás dentro de todos los puntos del proceso de producción de ideas, te da visión clara de cómo crecerlas y como hacerlas funcionar. Cómo hablarle a la gente, qué medios y plataformas integrar, cuáles son sus motivaciones, la velocidad a la que se mueve la información en internet, las herramientas que están a nuestra disposición y en general la manera emergente en que este ecosistema digital se mueve.

Vivir las redes sociales te enseña a estar en contacto con la gente, ya puedes ser el primero en darte cuenta de una tendencia, necesidad o crisis.

Una buena campaña de información y prevención en cualquier gobierno y que destaque por su trabajo en cuestión gráfica durante una pandemia como la que vivimos con el COVID-19, es trascendental para seguir enfrentando la situación. Todo ese proceso de planeación que lleva una buena campaña y que al final busca que se adueñen del mensaje y no pase desapercibido.

Se requiere de ese “feeling” en el lenguaje para que el mensaje llegue a la población objetivo, ya sea a través de imágenes, animaciones, juegos de palabras o la combinación de éstas. La creatividad busca esa afinidad en la población y entender el tipo de mensaje causando el mejor impacto.

El diseño nos permite crear la comunidad del futuro, definir los vértices de la sociedad post-pandemia. Todos somos diseñadores de nuestra vida y nuestro entorno, ¿hasta dónde queremos llegar?

Si quieres conocer más al respecto o hacernos saber tus comentarios, ¡contacta al equipo de Revolución 5.0 al correo contact@disruptivelabs.mx o nuestras redes @DisruptiveLabs, con gusto te leemos!

Colaboración elaborada por Daniela Gutierréz, miembro del equipo de Disruptive Labs